Con mucha ilusión empezáis con los baños del bebé, pero la ilusión se esfuma cuando veis que cada vez que vais a bañarle se pone a llorar sin parar. No le gusta el momento del baño, ¡odia el baño!
Lo primera de todo es saber que es una situación habitual y en muchas ocasiones pasajera. Por lo que no cunda el pánico y ¡no os desaniméis!
De todas formas, os quiero aportar algunos trucos que podéis probar para intentar hacer el momento del baño más placentero. Y si hay algún truco que os funcione, me encantará que me lo digáis en comentarios 🙂
Tips para los bebés, niños y niñas que odian el momento del baño:
- Cambiar la hora del baño. Casi siempre optamos por bañarles por la noche, pero puede ser una buena idea mover la hora del baño a la mañana, mediodía, primera hora de la tarde… Evitar bañarle si está muy cansado o con hambre porque no estará predispuesto.
- A partir de los 15-18 meses podemos usar el juego simbólico para familiarizarnos con el momento del baño. Bañar a los muñecos, jugar en la bañera sin agua, jugar con juegos de agua…
- Revisar la temperatura del agua y la temperatura ambiente. Tenemos tendencia a poner la temperatura del agua muy caliente, esto les puede incomodar. También es importante revisar la temperatura ambiente y evitar corrientes de aire. Para que no pasen frío es más importante la temperatura ambiente que no poner el agua demasiado caliente. También os recomiendo vestir y desvestir dentro del baño.
- Poner música que le guste. Puede ser música más animada para incentivar el juego o música relajante y calmada para convertir el momento del baño en un momento de relax.
- Poner las luces más tenues. Las luces del baño suelen ser muy brillantes, blancas e intensas. Además, las superficies también pueden reflejar con más facilidad. Esto puede no ser agradable.
- También puede ocurrir que no les guste el contacto con la superficie del baño, que es dura y fría. Podemos poner alguna alfombra debajo o algún cojín específico para el baño. Si es un bebé, mejor usar una bañera pequeña para que se sienta más recogido y seguro.
- Importante usar jabones específicos infantiles. Yo os recomiendo enjabonar con las manos y evitar las esponjas.
- Si el problema es que no le gusta que le caiga agua en la cara, existen unas viseras específicas para esto, que permiten enjuagar el pelo sin que se le moje la cara ni los ojos. También puede ser que lo que no le guste sea el ruido del agua caer del grifo.
- Por supuesto podéis recurrir a un montón de juguetes para el agua, libros impermeables, colores para pintar, letras para pegar a la pared de la bañera… ¡hay un montón de opciones! Recordad que los juguetes de agua deben tener un cuidado especial, especialmente aquellos que pueden retener agua en su interior, ya que pueden acumular gérmenes. Tenéis un post sobre los riesgos de bañar a un bebé.
- Y siempre nos quedará la opción, si tenemos bañera, de bañarnos con él. El piel con piel y el tenerte cerca seguro que le relaja y transforma ese momento de drama en un momento de conexión.
Por último, durante todo el momento del baño intenta mantener la calma (aunque esté llorando porque no le gusta), mírale a los ojos, háblale, sonríele… que perciba que está seguro y que tú estás cerca. Las rutinas siempre nos ayudan porque si más o menos siempre bañamos a la misma hora, el bebé esperará ese momento y no será una sorpresa para él.