¿Tu hijo se resiste a hacer algo? Si cada vez que le pides algo a tu hijo, termináis enfadados… ¡esto es para ti!
Prueba este truco basado en la ciencia. Aquí tienes la referencia.
La clave es empezar con 3-4 pequeñas acciones que tu hijo ya hace fácilmente y luego pedir la tarea más difícil o que puede generar resistencia. En vez de pedir directamente lo que quieres que tu hijo haga, empieza por aquello que es más probable que quiera hacer.
Al iniciar con tareas fáciles, creamos una impulso de cooperación que hace que la tarea difícil sea más probable de aceptar.
Acción fácil -> Acción fácil -> Acción fácil -> Acción difícil
Ejemplo: Tu hijo no quiere lavarse los dientes antes de dormir.
Primero, pide cosas fáciles y agradables:
1️⃣Haz un salto super alto!
2️⃣Wow! Chócala!
3️⃣Puedes abrir la luz del baño? Super!
4️⃣Ahora, a lavar los dientes!
Si pruebas este truco con tu hijo o hija, cuéntame cómo te funciona.