La aparición de medusas en nuestras costas es un fenómeno cada vez más frecuente durante el verano. Éstas tienen unos tentáculos que están recubiertos por unas células que producen irritación y habones en la piel; con dolor, escozor, inflamación y picor intenso.
Las picaduras de medusas suelen ser leves, aunque muy molestas y dolorosas. Por este motivo, es recomendable evitar siempre el baño en zonas dónde haya medusas.
Pero, ¿qué podemos hacer ante una picadura de medusa?
- No frotar la zona afectada con nada, ni con arena ni con la toalla. Evitar rascarse ya que empeorará el cuadro.
- Limpiar la herida con agua salada. NUNCA CON AGUA DULCE. No usar alcohol, jabón ni orina.
- Aplicar amoníaco diluido al 50% con agua de mar (si se dispone de él). La aplicación de vinagre puede mejorar el cuadro, aunque depende del tipo de medusa.
- Aplicar frío local. Se puede usar una bolsa con hielo aunque nunca se debe aplicar directamente sobre la piel. Se puede aplicar a intervalos de 5-15 minutos.
- Extraer cualquier resto de tentáculo que haya quedado adherido a la piel usando unas pinzas, guantes, tarjeta de crédito… En caso de usar unas pinzas debemos tener cuidado de no romper los tentáculos al extraerlos.
- El médico os puede recomendar un tratamiento en función de la extensión y del dolor de la picadura: analgesia, antihistamínico para el picor, crema de corticoides o antibiótico en caso de riesgo de infección.
Si aparecen otros síntomas o éstos empeoran, deberemos acudir a un servicio de urgencias.